Movimiento de los Focolares
Crear una mentalidad de paz

Crear una mentalidad de paz

La violencia, el odio, las actitudes belicosas a menudo también están presentes en aquellos países que viven “en paz”. Cada pueblo, cada persona siente un profundo anhelo de paz, de concordia, de unidad. Sin embargo, a pesar de los esfuerzos y la buena voluntad, después de milenios de historia nos encontramos incapaces de una paz estable y duradera. Jesús vino a traernos la paz, una paz ─nos dice─ que no es como la que “da el mundo”, porque no es solo ausencia de guerra, de peleas, de divisiones, de traumas. “Su” paz es también esto, pero es mucho más: es plenitud de vida y de alegría, es salvación integral de la persona, es libertad, es fraternidad en el amor entre todos los pueblos. ¿Y qué hizo Jesús para darnos “su” paz? Pagó con su vida. Precisamente cuando nos prometía paz, fue traicionado por uno de sus amigos, entregado en manos de los enemigos, condenado a una muerte cruel e ignominiosa. Se puso en medio de los contendientes, se hizo cargo de los odios y las separaciones, derribó los muros que separaban a los pueblos. Muriendo en la cruz, después de haber experimentado por amor a nosotros el abandono del Padre, reunió a los hombres con Dios y entre ellos, trayendo a la tierra la fraternidad universal. También a nosotros la construcción de la paz nos exige un amor fuerte, capaz de amar incluso a quien no corresponde con su amor, capaz de perdonar, de superar la categoría del enemigo, de amar a la patria ajena como la propia. (…)

La paz comienza con la relación que puedo establecer con cada uno de mis prójimos. “El mal nace del corazón del hombre” ─escribió Igino Giordani─ y “para eliminar el peligro de la guerra, es necesario eliminar el espíritu de agresión, explotación y egoísmo del que proviene la guerra: es necesario reconstruir una conciencia”. (…) El mundo cambia si cambiamos nosotros. Ciertamente debemos trabajar, cada uno según sus posibilidades, para resolver los conflictos, para elaborar leyes que favorezcan la convivencia de las personas y de los pueblos. Pero sobre todo, poniendo de relieve lo que nos une, podremos contribuir a la creación de una mentalidad de paz y trabajar juntos por el bien de la humanidad. Testimoniando y difundiendo valores auténticos como la tolerancia, el respeto, la paciencia, el perdón, la comprensión, las otras actitudes, que son contrarias a la paz, se alejarán por sí solas. Esta fue nuestra experiencia durante la Segunda Guerra Mundial, cuando entre nosotras, pocas chicas, decidimos vivir solo para amar. Éramos jóvenes y temerosas, pero en cuanto nos esforzamos en vivir la una por la otra, por ayudar a los demás empezando por los más necesitados, por servirles incluso a costa de la vida, todo cambió. Nació en nuestros corazones una fuerza nueva y vimos a la sociedad empezar a cambiar de rostro: comenzó a renovarse una pequeña comunidad cristiana, semilla de una “civilización del amor”. Al final es el amor el que vence porque es más fuerte que todo.

Chiara Lubich

(Chiara Lubich, Parole di Vita, Città Nuova, 2017, p. 709/12)

One Human Family – Una sola familia: el camino revolucionario hacia la paz

One Human Family – Una sola familia: el camino revolucionario hacia la paz

Ha concluido recientemente con una peregrinación de fraternidad a Asís, el congreso internacional interreligioso «One Human Family», promovido por el Movimiento de los Focolares. Presentes 480 personas de 40 países; 12 los idiomas hablados.

En la ciudad de la paz, la oración por la fraternidad, la justicia y la reconciliación para todos los pueblos en conflicto, ha resonado como un pacto solemne, acogido y pronunciado por los participantes, cada uno según su fe.

Entre ellos rabinos y rabinas, imanes, sacerdotes católicos, monjes budistas Theravada y Mahayana, además de laicos judíos, musulmanes, cristianos, hindúes, budistas, sijs y bahá’ís y fieles de las religiones tradicionales africanas, de todas las generaciones.

El congreso fue realizado por un equipo interreligioso que centró el programa en el bien supremo de la paz, hoy extremadamente amenazada.

Encuentro, escucha, pasos de reconciliación, compartición del dolor de los pueblos han sido la cifra de este congreso que ha alternado paneles conducidos por expertos con grupos de diálogo entre los participantes. Política y acción diplomática internacional, economía, Inteligencia artificial y medioambiente han sido los temas tratados, todos ellos con vistas a la paz. Numerosos los académicos y expertos de muchas culturas, religiones y proveniencias, que han intervenido; citamos solo algunos de ellos: el embajador Pasquale Ferrara, Director General de Asuntos Políticos y de Seguridad del Ministerio de Asuntos Exteriores y Cooperación Internacional, el Gran Rabino Marc Raphaël Guedj, la teóloga musulmana Shahrzad Houshmand Zadeh, la Dra. Kezevino Aram, Presidenta de la organización india “Shanti Ashram”, la Revda. Kosho Niwano, Presidenta designada del movimiento budista japonés Risho Kossei Kai, el Ing. Fadi Shehadé, fundador del Proyecto RosettaNet, ex CEO de ICANN, el economista Luigino Bruni, la filósofa india, profesora Priya Vaidya, el teólogo islámico Adnane Mokrani, el profesor Dicky Sofjan, indonesio, del Centro Internacional de Derecho y Estudios Religiosos, el profesor Fabio Petito, profesor de Religión y Asuntos Internacionales en la Universidad de Sussex y muchos otros.

“Las religiones tienen una función fundamental hoy en día”, reiteró el embajador Ferrara. “Contrariamente a lo que dicen los realistas de las relaciones internacionales, la guerra no es la condición normal de la humanidad. Las religiones pueden desempeñar el papel de ‘conciencia crítica’ de la humanidad y dirigirse a la política, señalando cuáles son las prioridades. Se necesita imaginación política; imaginar de una manera constructiva, nueva, creativa, el futuro de este planeta. Debemos cultivar algo que en este momento falta en las relaciones internacionales, que es la confianza”.

Fueron muy nutridas también las sesiones dedicadas a testimonios personales, proyectos, acciones centradas en la colaboración entre personas y comunidades pertenecientes a diferentes fes religiosas por la paz y en apoyo de las necesidades de sus respectivos pueblos.

El 3 de junio, una delegación de 200 participantes fue recibida en audiencia por el Papa Francisco, quien en su discurso definió el camino iniciado por Chiara Lubich con personas de diferentes religiones como: Un camino revolucionario que hace mucho bien a la Iglesia”.El fundamento sobre el que se apoya esta experiencia – afirmó el Santo Padre─ es el Amor de Dios que se realiza en el amor recíproco, en la escucha, en la confianza, en la acogida y en el conocimiento los unos de los otros, en el pleno respeto de las respectivas identidades”.

“Si por un lado estas palabras nos dan una profunda alegría –comentó Margaret Karram, Presidenta de los Focolares – por otro lado sentimos la responsabilidad de hacer mucho más por la paz. Por eso queremos trabajar para reforzar y difundir la cultura del diálogo y del «cuidado» de las personas y de la creación. El Papa nos lo confirmó cuando dijo que el diálogo entre las religiones es una condición necesaria para la paz en el mundo. En tiempos terriblemente oscuros como estos, la humanidad necesita un espacio común para concretar la esperanza”.

Stefania Tanesini

Gallería fotográfica: © CSC Audiovisivi – Caris Mendes e Carlos Mana, Vatican Media, RKK.

Evangelio vivido: la bienvenida a la reciprocidad

Evangelio vivido: la bienvenida a la reciprocidad

Quien ama participa de la vida de Dios y experimenta su libertad y la alegría de quien se entrega. Salir de nosotros mismos y encontrarnos con los demás a través de la escucha abre las puertas a la comunión con los hermanos y da vida a la reciprocidad. En la cárcel Soy capellán de prisión. Para mí, cada uno de los presos es un “Cristo preso” al que hay que amar. Durante la Cuaresma, para prepararlos a la Pascua, pensé en leerles algunos pasajes del Evangelio acompañados de experiencias. Al notar cierto interés, pensé en presentarles algunos jóvenes involucrados en un movimiento eclesial. Habiendo obtenido los permisos necesarios, la primera vez que llegaron, antes de poner un pie en prisión, oramos para que nuestra presencia allí fuera un regalo para los presos. No hablamos mucho. Pero después de celebrar la Misa, animada por los cantos de aquellos jóvenes, vi llorar a hombres endurecidos en una vida rebelde y los oí decir: “¡Aún quedan rostros limpios!”. Evidentemente, nunca antes habían visto algo así. Todavía hoy, una vez al mes, esos jóvenes regresan para animar la misa, siempre esperados con impaciencia. Y cuando un recluso fue trasladado a otra prisión para estar más cerca de su familia, lamentaba solo una cosa: perder el contacto con esos jóvenes. (p. Marco – Italia) En verdadera comunión Había recibido una llamada de una de mis compañeras de la Academia de quien no tenía noticias desde hacía mucho tiempo. Me pidió noticias, entre otras cosas sobre los niños y en particular sobre el último nacido. Evidentemente, no sabía que el embarazo no había llegado a término. En ese momento le conté lo que había sucedido, pero al mismo tiempo sentí que le podía comunicar la experiencia más íntima de aquel doloroso acontecimiento: la unión particular con Dios vivida también gracias al apoyo y al amor concreto de mis familiares y amigos. Mientras hablaba, sintiendo una profunda escucha por parte de mi amiga, pensaba que durante nuestros estudios nunca nos habíamos atrevido a hablar de Dios. Por eso fue una gran sorpresa cuando al final de la llamada me confió: “Sabes, en el fondo siempre he sido creyente, aunque no quería admitirlo, pero ahora, sintiéndote tan serena, experimento un gran deseo de profundizar en este conocimiento. ¿Por qué no nos juntamos y hablamos de ello?”. (J.V. – Bélgica)

Maria Grazia Berretta

(Tomado de Il Vangelo del Giorno, Città Nuova, año X– n.1 mayo-junio de 2024)

Desencadenar el cambio: Semana Mundo Unido 2024

Desencadenar el cambio: Semana Mundo Unido 2024

Del 1 al 7 de mayo vuelve la Semana Mundo Unido, un taller y una exposición mundial de iniciativas para restablecer la paz y la fraternidad entre las personas y los pueblos. Del 1 al 7 de mayo 2024 vuelve la Semana Mundo Unido (SMU), que este año concentra su compromiso global en la paz buscada y construida desde múltiples frentes: atención a los más pobres, a los excluidos, al cuidado del medio ambiente, a la formación de las conciencias, a la educación a la paz. El lema de este año es “Embrace Humanity, Spark Change” es decir “Abraza la Humanidad, Desencadena el Cambio”; punto de partida e inspiración para muchas iniciativas que se están llevando a cabo en diversas ciudades del mundo. SMU 2024, Genfest Mundial Comenzará con un evento internacional de apertura de la SMU el 1 de mayo en Loppiano (Florencia-Italia), y a partir de ese momento otras ciudades de todo el mundo se sumarán a la iniciativa, que continuará hasta el 7 de mayo para convertirse en una especie de “laboratorio” para crear sinergias, compartir ideas, buenas prácticas y creatividad. La SMU 2024 se celebra dos meses antes del Genfest, el Festival Mundial de la Fraternidad promovido por los jóvenes del Movimiento de los Focolares que se realizará en Aparecida, Brasil, en julio próximo, y presenta el compromiso “local” de muchas comunidades de los Focolares que, en red con Organizaciones, Movimientos e Instituciones, están comprometidas en los contextos locales para responder a las necesidades y a los desafíos más necesarios en un determinado territorio. El “cambio” que los jóvenes del Movimiento de los Focolares, junto con sus comunidades, quieren promover se centra en las áreas del mundo más devastadas por la guerra, el impacto medioambiental y las migraciones forzadas. Quiénes son los protagonistas de la SMU Son jóvenes de todo el mundo: está Giacomo, italiano, que se fue a Kenia gracias al proyecto de voluntariado internacional MilONGa, donde trabajó en algunos orfanatos de Nairobi. O Daphne, de la India, que cuenta la aventura de Reach Out, el proyecto que, en Goregaon ─un suburbio del este de Bombay─, ha sido creado por algunos jóvenes del lugar para ayudar a unas 70 familias en situación de pobreza. En cambio, Ícaro, Sam y David, viven en Brasil, en Fortaleza, donde están haciendo una experiencia de voluntariado en el “Condominio Espiritual Uirapuru” (CEU), un campus donde están presentes 21 asociaciones que atienden a niños necesitados, personas con VIH y drogadictos. 1 de mayo, apertura de la SMU Estas y otras historias se presentarán durante la apertura de la SMU de Loppiano con un evento internacional que se retransmitirá en directo y se traducirá en 5 idiomas (italiano, español, portugués, inglés y francés) y que podrá seguirse en el canal de YouTube de UWP o conectándose a la página web de UWP (unitedworldproject.org). Para la ocasión, la ciudadela internacional de los Focolares acogerá tres aldeas temáticas: la paz interior, la paz con los demás, la paz en el mundo. En estos espacios, los participantes podrán participar en numerosos talleres para profundizar en el tema de la paz (Economía de paz, No hay diálogo sin escucha, Los conflictos en nuestras ciudades, ¿El agua como fuente de paz?  El proyecto Living Peace International, Paz y arte: la armonía entre pueblos diferentes, etc.). El hilo conductor que idealmente unirá su itinerario es el descubrimiento del arte del diálogo. Accediendo a la página web del UWP, se podrán seguir otros eventos e historias de la SMU, como el Peace Got Talent, que se realizará el 4 de mayo. Pero también Run4Unity, la carrera de relevos por la paz y la unidad, promovida por miles de adolescentes de todo el mundo (¡pero también corren adultos!) y que se celebrará el 5 de mayo: donde sea posible, los eventos deportivos se celebrarán en lugares que sean símbolos de paz, en la frontera entre países o comunidades en conflicto, o en cualquier caso en lugares que “hablen” de inclusión….

Stefania Tanesini

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Costa de Marfil: Simposio EdC sobre la revolución de la gratuidad

Costa de Marfil: Simposio EdC sobre la revolución de la gratuidad

El pasado 13 de abril el Instituto Universitario CERAP de Abiyán (Costa de Marfil) fue anfitrión en el simposio sobre la Economía de Comunión cuyo título era: “La revolución de la gratuidad: un nuevo paradigma para la economía africana”. El 13 de abril de 2024 el Instituto Universitario Cerap en Costa de Marfil fue el anfitrión de un vibrante simposio sobre la Economía de Comunión (EdC). Con la presencia de 146 participantes, provenientes principalmente de la prestigiosa Facultad de Economía de esta Universidad, el evento proporcionó una plataforma para discusiones estimulantes y nuevas intuiciones sobre modelos económicos alternativos. Teniendo como fondo los modelos económicos prevalentes hoy, marcados por una cultura del consumo más que por una “cultura del dar”, los participantes se integraron con entusiasmo en las presentaciones de los relatores. El Padre Bertin Dadier y Madame Julie Bodou Kone ocuparon el centro de la escena, iluminando el potencial de transformación de la EdC como fuerza complementaria dentro de nuestro cuadro de mercado existente. Sus presentaciones profundizaron los principios y los valores fundamentales que están en la base de la EdC, favoreciendo una comprensión más clara entre los participantes.  A pesar del escepticismo inicial, se sucedieron intercambios incisivos con los participantes, quienes intentaron descubrir las implicancias prácticas de ese enfoque innovador. Uno de los momentos salientes del simposio fue la presentación de la empresa EdC de Chocomabs, que ofreció un ejemplo de cómo esos principios pueden ser traducidos en acción. Cuando los participantes profundizaron el caso de estudio, una sensación palpable de entusiasmo invadió la sala, destacando la relevancia de esas iniciativas en la sociedad actual. Steve William Azeumo, coordinador de Acción para la Economía de Comunión en África Central, presentó un discurso de gran impacto. Azeumo hizo hincapié en el rol crucial de la formación de empresarios EdC, ofreciendo ejemplos convincentes de Camerún para ilustrar su punto de vista. Además destacó la importancia de favorecer y promover esas empresas en la sociedad, simbolizando su relevancia a través de los siete colores del arco iris. En perspectiva, el impulso generado por el simposio permite catalizar cambios tangibles. Están en curso proyectos para la creación de un club EdC dentro de la universidad, que provea de una plataforma para la exploración y la colaboración continua entre la Comisión EdC, los estudiantes y los miembros de la facultad. Sustancialmente, el simposio EdC en el CERAP sirvió de catalizador para el diálogo, desafiando el pensamiento convencional y lanzando las bases para un futuro económico más inclusivo y sustentable.

Fuente: EdC

 

Chile: Habitar las vulnerabilidades

Chile: Habitar las vulnerabilidades

En una dimensión fragmentada y dividida como en la que vivimos, a menudo estamos llamados a dirigirnos hacia un más allá desconocido, hacia las periferias; a veces, estamos llamados a “salir” incluso de nosotros mismos para entrar en las heridas de esta humanidad. Es el testimonio que nos llega desde el barrio de Yungay, en Santiago de Chile.