Recientemente se ha publicado el volumen “Diario 1964 – 1980”, de Chiara Lubich. El texto ha sido preparado por el p. Fabio Ciardi omi y publicado por la editorial Città Nuova en colaboración con el Centro Chiara Lubich. “El Diario resulta ser una herramienta extremadamente valiosa, que permite atravesar el umbral de los acontecimientos externos (la ‘vida exterior’) y penetrar en la manera con el que se vivieron (la ‘vida íntima’)”. Con estas palabras el p. Fabio Ciardi omi, explica el contenido de los Diarios de Chiara Lubich, de los que ha preparado la reciente publicación De hecho, la editorial Città Nuova, en colaboración con el Centro Chiara Lubich, ha realizado el volumen con los “Diarios” de la fundadora del Movimiento de los Focolares, de 1964 a 1980. Esta publicación forma parte de la serie “Obras de Chiara Lubich”, de la que ya han visto la luz 5 volúmenes. “Hay unos quince volúmenes en preparación. No es la opera omnia – aclara p. Fabio Ciardi – porque la obra completa requeriría un trabajo enorme. El soporte papel incluye la obra de Chiara Lubich, es decir, las obras principales, y sobre todo las escritas. Los cuales van desde un primer volumen introductorio que será una biografía histórica”, y luego las cartas, los discursos públicos, los discursos fundacionales, las conversaciones. “Seguramente, las cartas y los diarios son quizás la parte más íntima de Chiara, añade. La que la deja al descubierto. Cuando ella se presenta con un discurso se trata de un texto elaborado, preparado y revisado. Sin embargo, cuando tengo acceso a su correspondencia, tengo acceso a su diario, allí no hay filtros. Es precisamente el injerto directo con el alma de Chiara. Diario y cartas son aquellas páginas que nos permiten tener una relación inmediata, directa y sin filtros con ella”. “El diario de Chiara Lubich es un poco particular – explica el p. Ciardi – porque no nació como un diario personal, sino precisamente para involucrar a todos los miembros del Movimiento en sus viajes. (…) . Al inicio comienza inmediatamente con la descripción de lo que sucede, por tanto, es el diario de una crónica, pero pronto, inmediatamente se convierte en un diario íntimo. Porque lo que ella tiene que comunicar no son sólo los hechos que está viviendo, sino cómo los está viviendo”. Los Diarios cubren dieciséis años y, para ayudar al lector a ubicar y a comprender mejor los textos de Lubich, p. Ciardi ha tomado una decisión editorial precisa: “Después de haber hecho una introducción general a todo el Diario, año tras año, propongo una introducción a ese año, situándolo también… contextualizándolo en la vida de la Iglesia, en la vida de mundo, de modo que podamos captar lo que está viviendo Chiara Lubich, pero en un horizonte más amplio el de la vida de la Obra, de la Iglesia y de la humanidad”. A quien quiera saber cuál es la mejor manera de leer este libro y por dónde empezar, p. Fabio responde así: “Entonces, lo primero que recomendaría es abrir al azar. Y leer una página. Seguramente resultará atractiva. Luego será una invitación para leer otra y otra. No importa si lo lees, digamos, todo de seguido. Puedes abrirlo al azar y leer un día, otro, un año, otro. Y entonces quizás esto dé ganas de seguir el hilo. Y luego empezar de nuevo desde el principio, poco a poco, y recorrer este camino, que es un camino… El camino de Chiara no es fácil. Es un viaje problemático. Hay momentos de prueba, momentos de enfermedad. Hay momentos en los que no escribe el diario. ¿Y por qué no lo escribe? Porque quizás esté viviendo un momento de oscuridad. Por eso, recorrer cronológicamente todo el viaje ayuda a comprender este mundo. Pero, para empezar, quizás puedas abrirlo al azar y leer aquí y allá. Luego vendrá el deseo de una lectura continua y completa”. “El diario es suyo, es personal, es su vida, concluye el editor. Y esto se deduce sobre todo del constante diálogo que existe en el Diario con Dios, con Jesús, con María, con los santos. (…) Ella nos muestra su alma, nos muestra lo que tiene dentro. Y esto tiene resonancia en mí, porque es como una invitación a hacer el mismo viaje, a tener la misma intimidad. Por eso, leyendo a Chiara, en definitiva, me reflejo, no en lo que soy, desgraciadamente, sino en aquello que debería ser”.
Carlos Mana
Video: In dialogo con p. Fabio Ciardi (habilitar subtítulos en español).
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