En diálogo
La regla de oro
alguno de los presentes podría preguntarme: el amor, amarse, ¿es compatible con el estilo de vida que nuestras culturas nos transmitieron? Sí, es compatible. Vayan a buscar vuestros libros sagrados y encontrarán, está en casi todos ellos, la “Regla de oro”. En el cristianismo se expresa así: “Hagan por los demás lo que quieren que los hombres hagan por ustedes” (cf Lc 6,31). Y así dice Israel: “No hagas a nadie lo que no te agrada a ti” (Tob 4,15). En el Islam: “Ninguno de ustedes es verdadero creyente si no desea para el hermano lo que desea para sí mismo” (Hadith 13, Al Bukhari). En el hinduismo: “No hagas a los demás lo que te causaría dolor si te lo hicieran a ti” (Mahabharata 5: 1517) Y todas significan: respeta y ama a tu prójimo.
Chiara Lubich a los “chicos por un mundo unido” reunidos en el Coliseo (Roma) el 26 de mayo de 2002
En comunión
“Yo-el hermano-Dios, se dice. Vamos a Dios junto con el hombre, junto con los hermanos, más aún, se va a Dios a través del hombre” explicaba Chiara Lubich en 1995.
La dimensión comunitaria por lo tanto es la primera y las más directa característica de la espiritualidad de la unidad de los Focolares.
Son estos tiempos los que requieren la unidad: entre laspersonas, los pueblos y las naciones. La comunión es un camino que no excluye la contribución personal de cada uno, sino que la potencia y enriquece el cuerpo social.
En diálogo
La difusión mundial del espíritu de los Focolares contribuyó a abrir varias formas de diálogo.
El Movimiento está comprometido en el diálogo entre Movimientos y nuevas Comunidadesdentrode la Iglesia católica y en el diálogo entre las distintas Iglesias y Comunidades eclesiales. La relación con fieles de distintos credos religiosos abrió el camino a un diálogo con las principales religiones.
La colaboración entre creyentes y personas de convicciones no religiosas generó un diálogo para caminar juntos haia la fraternidad dela familia humana. El diálogo con el mundo de la cultura abre la mirada a nuevas profundizaciones.
Iglesia-comunión
Comprometido en vivir por la unidad, el Movimiento de los Focolares quiere dar su aporte a la comunión entre Movimientos eclesiales y nuevas Comunidades nacidas dentro de la Iglesia Católica para descubrir y valorizar el don que cada realidad guarda en sí misma, da a los demás y con la cual enriquece la sociedad.
Interreligioso
En el panorama mundial que vive una profunda transformación hacia una sociedad cada vez más multicultural y de las más variadas religiones, el Movimiento promueve el diálogo entre las religiones, para que el pluralismo religioso de la humanidad no sea causa de divisiones y guerras, sino que contribuya a la fraternidad y la paz.
Ecuménico
El Movimiento, desde hace décadas, recorre un camino de diálogo ecuménico con cristianos de alrededor de 350 Iglesias y comunidades eclesiales. Basado en el “diálogo de la vida”: una experiencia que nace del recíproco conocimiento, de la compartición del pensamiento y de las experiencias sobre el Evangelio vivido.
Distintas convicciones
El Movimiento de los Focolares está en contacto con muchas personas que no tienen una fe religiosa, pero que viven según su conciencia, fieles a los grandes valores comunes a toda la humanidad. Personas creyentes y personas de convicciones no religiosas colaboran juntas para componer, en la fraternidad, la familia humana.