Movimiento de los Focolares
Todo es distinto, pero nada cambió

Todo es distinto, pero nada cambió

ElisaNuinElisa vive en el Focolar de Welwyn Garden City, 35 Km al norte de Londres, en el condado de Herfordshire. Una “ciudad-jardín”, fundada en los años Veinte, con hermosos edificios de estilo neo-georgiano, rosas rodeando las entradas, calles arboladas. Nos cuenta: «Nací en el norte de Italia, en un pequeño pueblo de la provincia de Novara. Tengo dos hermanos más chicos. Mi familia nos transmitió los valores cristianos, como por ejemplo “pensar en los demás”. A los veinte años, habiendo terminado los estudios de francés e inglés, estaba buscando un trabajo. Pero en una pequeña ciudad era difícil encontrarlo, estaba muy desalentada. Una amiga mía me invitó a un encuentro en el que se estaba organizando un viaje a Roma, para asistir al Genfest, una gran manifestación de los jóvenes del Movimiento de los Focolares  que se iba a realizar en el estadio Flaminio. Estábamos en mayo del ‘80.  Fui, pero solamente para pasar un fin de semana distinto. En cambio me quedé sorprendida y conmovida de la escena que vi: los posters que hablaban de un mundo unido, el entusiasmo de decenas de miles de jóvenes.  Tuve la clara sensación de haber encontrado algo precioso. Volviendo, seguí vinculada con estas personas. Había algo que me atraía en ellos. Comencé a frecuentar el focolar, mientras que dentro se me aclaraba lo que quería hacer en la vida. Hasta que comprendí: donarme a Dios y a los hermanos, precisamente a través del Focolar. Encontré un buen trabajo en Caritas, la acción social de la Diócesis. Un trabajo interesante y de responsabilidad. Después de tres años, tuve que trasladarme a Boloña, pero el sacerdote responsable de Caritas trataba con insistencia de convencerme para que no me fuera. Ese día el Evangelio hablaba justamente que “aquellos que no dejan madre, padre y campos… no pueden… ser mis discípulos”. Pensé que Jesús dirigía esas palabras a mí. Me fui sin dudar. Desde 1985 a 1987 estuve en la escuela de formación de la ciudadela de Loppiano (cerca de Florencia, Italia). Y después… ¡África!. Mi primera impresión fue la de encontrarme dentro de una película, todo era nuevo y distinto. El día después de mi llegada, en una capilla, delante del tabernáculo, Le dije: “Tu eres el mismo Jesús, di mi vida por Ti y ahora te encuentro también aquí”. Pasé el primer mes en Fontem, en Camerún. Después me fui a Nigeria, donde me quedé veinte años. En 1989, en Lagos, comenzamos un proyecto para un grupo de chicas. Para alojarlas, una religiosa nos ofreció dos habitaciones dentro de su misión, después una familia nos dio una casa gratis durante cinco años. Finalmente encontramos un terreno y muchas personas nos ayudaron a construir el primer focolar de Nigeria. Todo sucedía gracias a la inesperada ayuda de Dios a través de la gente. Encaminamos una pequeña empresa de producción de trabajos en batik, una técnica tradicional de pintura en cera aplicada a la tela. El proyecto ayudó a una innumerable cantidad de chicas a lo largo de los años. En el 2002, en Jos, en Nigeria septentrional, casi un millar de personas perdieron la vida en un combate entre musulmanes y cristianos. Hasta ese momento los dos grupos habían vivido siempre en paz. Justamente en Jos quisimos hacer una Mariápolis, porque era necesario experimentar el diálogo, la paz, la reconciliación, especialmente en un lugar que tenía heridas profundas, no solamente físicas. Las personas habían perdido sus empresas, los lugares de culto habían sido destruidos. Una señora, que anteriormente había incitado a los jóvenes de su pueblo a combatir contra los rebeldes, al final de la Mariápolis formó un grupo que viajó durante un mes, como gesto de reconciliación, de pueblo en pueblo, como lo deseaba el obispo de la localidad. Posteriormente durante seis años estuve en Douala, en Camerún. Después, desde el 2013, estoy en Welwyn Garden City (Gran Bretaña) donde, el primer año, nevó ¡desde febrero hasta abril! Afuera todo era distinto, pero nada había cambiado. Donde Dios te quiere, ¡ésa es tu casa!».   Fuente: New City Magazine (Londres)

Brasil: Forum mundial de la paz 2016

Brasil: Forum mundial de la paz 2016

20161018-02La décima edición delForum mundial de la paz”’  y la segunda del “Forum Mundial de los Jóvenes por la Paz”  se llevó a cabo contemporáneamente en Florianópolis, Brasil (22-25 de septiembre), con algunos programas compartidos y otros por separado. El Forum vió la participación de 1.500 jóvenes y adultos que venían de 60 países, de diferentes culturas y creencias religiosas. El tema “Nosotros Creemos”, estuvo articulado de esta manera: Nosotros creemos en el cambio, Jornada dedicada a la ecología; Nosotros creemos en los derechos humanos, Jornada dedicada a la humanidad; Nosotros creemos en la paz, Jornada dedicada a la educación. 21 de septiembre, la ceremonia de apertura se realizó en la plaza, frente a la Catedral, donde se presentó un espectáculo con más de 400 bailarines. Entre las cinco banderas agitadas durante la coreografía, estaba también la del Movimiento de los Focolares. La característica principal de la ceremonia la representó el profundo clima de oración en favor de la paz. El 22 de septiembre, se llevó a cabo una marcha por la paz a lo largo de las calles de la ciudad, en la que participaron niños, jóvenes y adultos. «Ha sido una gran emoción – comenta Carlos Palma, Presidente del Forum Mundial de los Jóvenes por la Paz – ver escrito, sobre la puerta de una de las grandes aulas, el nombre de Chiara Lubich acompañado del título “Constructor de Paz” (atribuido por la UNESCO en 1996 por la Educación a la Paz)». 20161018-05El Forum con los jóvenes fue una explosión de vida con conmovedores testimonios de sus diferentes proyectos y experiencias personales vividas comprometiéndose a favor de la paz. El 23 de septiembre, otros 500 jóvenes provenientes de todo el mundo se conectaron mediante la web a la Conferencia Mundial de los Jóvenes por la Paz que forma parte del proyecto Living Peace International en colaboración con Peace Pals International (New York, USA), que se realiza cada dos meses. El Forum mundial de la Paz concluyó el 25 de septiembre con un profundo momento de oración interreligiosa, con unos 30 representantes de diferentes religiones y tradiciones espirituales. Una parte importante del programa fue la dedicada a la Educación a la Paz, en el centro de la cual se hizo la presentación de Living Peace. La presentación y la historia de este proyecto, cómo se ha difundido en todo el mundo y su pedagogía, fue acompañada por una serie de testimonios de jóvenes de Brasil, España, Paraguay, Estados Unidos de América y de otras partes del mundo. 20161018-03La consigna del Premio Luxemburgo por la Paz a Omar Abou Baker del Cairo, un joven de Living Peace International fue un momento particularmente emotivo. Al igual que el anuncio de las sucesivas ediciones del Forum Mundial de la Paz: en Amman (Jordania), en el mes de septiembre de 2017 junto a los adultos, y otro en Manila /Filipinas), organizado por los jóvenes con ocasión del Genfest 2018. La firma, en una solemne ceremonia, del Protocolo de Florianópolis, que lleva por título “1% por la Paz”, fue una digna conclusión. Este documento propone a las organizaciones privadas y públicas destinar el 1% de lo que invierten en la seguridad interna y externa, al financiamiento de acciones y proyectos para la formación de una cultura de paz. Eliana Quadro, una joven voluntaria de los Focolares de Florianópolis, recibió una medalla de plata: “Comandante del Forum Mundial por la Paz”, en reconocimiento a su labor en la realización del evento. «El Forum se ha caracterizado por las relaciones profundas que se han creado, – concluyó Carlos Palma – por la gran alegría que albergaban los corazones de todos los participantes, y sobre todo, por la inmensa gratitud hacia Dios y hacia el carisma de Chiara Lubich que nos impulsa hacia la humanidad, haciéndonos constructores de paz y de unidad».


Alegría e interés por el Sínodo sobre los jóvenes

Alegría e interés por el Sínodo sobre los jóvenes

Scuola Bianco gen 2La decisión del papa Francisco de dedicar la XV Asamblea General Ordinaria del Sínodo de los Obispos aLos jóvenes, la fe y el discernimiento vocacional“, en octubre de 2018, fue recibido con alegría e interés también por el Movimiento de los Focolares y, con acentos particularmente significativos, por sus ramas juveniles. Las nuevas generaciones siempre han sido esenciales para la vida de los Focolares, en la reciprocidad con los adultos que acompañan a los jóvenes en el discernimiento de su proyecto de vida. Las primeras reacciones de los jóvenes de los Focolares: “Es una buena noticia y también una respuesta. La elección corresponde a una necesidad. Ya estamos tratando de vivir la vocación no como una opción en sí misma, sino como realidad unida a la fe. Es hora de unificarla en nuestras vidas. ¡Estamos contentos de que el Papa piense en nosotros! “. (Gloria, Uganda) “Estupenda noticia. Si no se ofrece un ambiente bueno para los jóvenes en la Iglesia hoy, no habrá una cultura buena en la Iglesia mañana. Creo que el Papa quiere dejar la Iglesia en buenas manos. Se necesita buenos pensamientos acerca de cómo vivir la vocación. Y no sólo en lo referente a opciones futuras: casarse, ser sacerdote, religioso, focolarino… En la formación con los Focolares aprendí a considerar la vocación también en el presente, como una respuesta para vivir inmediatamente. Así que espero que el Sínodo se centre en este aspecto para dejar la Iglesia en buenas manos”. (Ryan, Estados Unidos) “Ha sido una sorpresa. Estoy segura de que el Papa sabrá llegar a todos los jóvenes. Muchos alejados de la Iglesia se interesaron por su encíclica sobre el medio ambiente. Veo en este Sínodo una gran oportunidad. Si se llega a todos será fantástico”. (Amanda, Brasil) “Lo que se aprende de la Iglesia católica en el Estado donde yo crecí, difiere en algunos aspectos de lo que se aprende en otro Estado. Los pensamientos son diferentes, aunque hay herramientas comunes como el Youcat. La globalización y las redes sociales nos ponen en contacto con lo que la Iglesia enseña en otras partes del mundo. La diferencia de enfoques sobre cuestiones importantes puede generar confusión ante la ausencia de una voz clara. Este Papa y la Iglesia universal juegan un papel importante, teniendo en cuenta la diversidad de culturas. Veo en el Sínodo una buena perspectiva”. (Aileen, India) “En los jóvenes crece la información sobre los problemas de la Iglesia, particularmente sobre temas candentes: escándalos, cuestión social, Iglesia y política. Son argumentos que en el Perú, por ejemplo, crean    siempre más distancia entre la posición del clero y la realidad de los jóvenes. La noticia del Sínodo me da esperanza: podría mostrar un rostro más humano de la Iglesia, con la ayuda de jóvenes y de sus ideas, utilizando los medios y las redes sociales de manera transparente y convergente”. (Jorge, Perú) “Crecí en la parroquia. Creo que el tema vocación y juventud se tendría que haber abordado hace años. Hoy estamos en medio de una crisis de vocación en general: a la familia, también a la vida religiosa, como ciudadanos, etc. Por esto puedo decir: Gracias por la opción”. (Damián, Argentina) “La Iglesia ha demostrado apertura hacia la juventud con las Jornadas Mundiales. Con el papa Francisco creo que se desea pasar de la teoría a la práctica poniendo en primer lugar a los jóvenes. También porque seremos nosotros los que encontraremos soluciones para un mundo en conflicto. A veces se piensa que los jóvenes no somos capaces de afrontar los problemas, pero con gente con experiencia y madurez llegamos a soluciones. Es como si el Papa nos dijera: “Están listos para el desafío”. (Jorge, El Salvador) “Quién sabe cómo se desarrollará, de hecho, este Sínodo. Pero si los jóvenes pudieran participar en persona sería importante. Creo que el deseo de todos es tener una voz activa en este Sínodo”. (José Luis, Brasil) Los jóvenes de los Focolares gozan también de la coincidencia del Sínodo con la cita que se han dado en Manila para el mes de julio de 2018, el Genfest, donde convergerán de los cinco continentes. “Es una coincidencia maravillosa. Estaremos en las Filipinas, en un continente con muchos jóvenes y mirados con atención por el Papa. Este tiempo de preparación nos hará comprender cómo podemos dar nuestro aporte al Sínodo”. (José Luis, Colombia) Fuente: Notas de Prensa

Busquen la plenitud de la alegría

Busquen la plenitud de la alegría

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(C) CSC Audiovisuales

Al joven filipino que le preguntaba: “Con el corazón en la mano, ¿qué quisieras decirnos a todos nosotros, que estamos aquí en el Genfest, y a los jóvenes del mundo que nos siguen por televisión?”, Chiara Lubich respondió: «Les repito lo que dijo una vez santa Catalina de Siena, una gran santa, una mujer maravillosa, hablando a sus discípulos: “No se contenten con cosas pequeñas porque Él, Dios las quiere grandes”. Yo les digo: gen, jóvenes, no se contenten con las migajas. Tienen una única vida. Aspiren a lo más alto. No se contenten con las pequeñas alegrías, busquen las grandes, busquen la plenitud de la alegría. Me podrán preguntar: “¿Dónde la encontramos, Chiara?”. Bien, acabo mi discurso nombrando una vez más a Jesús. Él dijo que quien vive la unidad tendrá la plenitud de la alegría. Por tanto la herencia que recibirán, si viven este ideal, será la plenitud de la alegría. Esto es lo que anhelo para ustedes y la última palabra que les dejo». Roma, Palaeur, Genfest 20 de mayo de 1995   Fuente:  Cercate la pienezza della gioia. 50 risposte ai giovani, Città Nuova 2012

Chiara Lubich a los Jóvenes por un Mundo Unido

Chiara Lubich a los Jóvenes por un Mundo Unido

1271678«Queridísimos Jóvenes por un Mundo Unido: Sé que desean recibir un mensaje que contribuya también al buen éxito de la Semana Mundo Unido. ¿Qué tema deseo tratar? No puedo elegir uno más apropiado que el objetivo de ustedes: el mundo unido. Pero, ¿podemos hablar de mundo unido? ¿Es factible pensar en un mundo unido, de manera que la atención que le dedicamos y las fuerzas que empleamos para ello puedan cooperar realmente para alcanzar un día ese objetivo? ¿Acaso la nuestra es una utopía, irrealizable y fantástica, como alguien puede pensar? Vivimos tiempos en los que no faltan los indicios de que el mundo se encamina hacia ese objetivo. En primer lugar, la convicción de que la unidad es un signo de los tiempos. Y esto significa que las personas que poseen especiales cualidades y capacidades para escrutar los tiempos en los que vivimos afirman que el mundo se encamina hacia la unidad. Varias veces yo misma he hablado sobre esto, y quizás algunos lo recuerden, pero lo he hecho examinando sobre todo su aspecto religioso. Pero esa tendencia a la unidad, en esta época, no se limita a este ámbito; se extiende también al político. Además de la ONU, integrada por casi todos los Estados del mundo, existe en África, por ejemplo, la Organización de la Unidad Africana, o sea, una organización compuesta por casi todos los Países africanos. En Asia existen varias asociaciones de Estados como: la Organización de la Conferencia Islámica, que comprende 53 Países musulmanes; la Asociación de Naciones del Sudeste Asiático, y otras. En América recordamos la Organización de Estados Americanos (del Norte, Centro y Sudamérica), y el Sistema Económico Latinoamericano. En Europa existe la Comunidad Económica Europea Central que además comprende los Países del Este y la Unión Europea. Por otra parte, muchas personas de gran sabiduría y de diferentes culturas han expresado su pensamiento sobre este tema; y sería bueno conocerlo. Pero aquí, en Brasil, desde donde les dirijo este mensaje, no tengo la posibilidad de tenerlo a mano. Encuentro solamente algunos pensamientos de los últimos Papas que, por ser personas santas, además de acreditadas, afirman cosas que pueden interesar a todo el mundo. Tanto el Papa Pío XII, como Juan XXIII y Pablo VI expresaron ideas parecidas a esas. Pablo VI, en la Populorum Progressio, dice: “… ¿Quién no ve la necesidad de llegar progresivamente a instaurar una autoridad mundial que pueda actuar eficazmente en el terreno jurídico y político?”. El Papa actual, en nuestro Genfest 1990, se expresó así: “Realmente, parece que la prospectiva que emerge de los múltiples signos de los tiempos es la de un mundo unido. Es la gran expectativa de los hombres de hoy, la esperanza y, al mismo tiempo, el gran desafío del futuro. Percibimos que estamos procediendo hacia la unidad bajo el impulso de una excepcional aceleración”. Queridísimos jóvenes: Ustedes aspiran, ustedes trabajan por un mundo unido. ¿Y qué hacen? Actividades, que pueden parecer incluso pequeñas y desproporcionadas, aunque significativas, frente al objetivo que se han propuesto. Tal vez, cuando tengan unos años más, alguno de ustedes  podrá trabajar directamente en los distintos organismos orientados al mundo unido. Pero pienso que, aunque todo eso será muy útil, no será ni eso ni aquello lo que contribuirá a realizarlo de manera decisiva. Lo principal será ofrecer al mundo, en este proceso hacia la unidad que lo domina, un alma. Y esa alma es el amor. Deben desencadenar a su alrededor, en todos los Países donde viven, la revolución del amor. Hoy no basta hacer beneficencia o prestar asistencia, aunque con ello damos por amor. Hoy es necesario “ser el amor”, o sea, sentir lo que el otro siente, ‘vivir el otro’ , ‘los otros’, y tender a la unidad según nuestra espiritualidad de fuego, ya encendida por acá y por allá, también gracias a ustedes, por todo el planeta. Lo afirmaba también Juan Pablo II, aún en el Genfest 1990: “Sean conscientes – lo repito – que el camino hacia el mundo unido… se basa en la construcción de relaciones solidarias y la solidaridad tiene sus raíces en la caridad” (en el amor). Por tanto, construir relaciones de unidad enraizadas en el amor. Y deben vivir este amor antes que nada entre ustedes. Y así, llegar a realizarlo con muchos, muchos, en todos los ambientes que frecuentan: entre la gente, por ejemplo, entre los que deciden el destino de los pueblos, en las instituciones, en las organizaciones pequeñas y grandes del mundo… en todas partes. Entonces sí que las intenciones de quienes las instituyeron alcanzarán el objetivo. Y se trabajará realmente por un mundo unido. Coraje, entonces, Jóvenes por un Mundo Unido. Sigan el más fascinante y espléndido Ideal que pueda existir en la Tierra. Y ¡no están solos! Lo saben ustedes, que están orgullosos del nombre de cristianos, pues si viven así, Cristo está entre ustedes. Lo saben ustedes, que tienen otra convicción o creencia religiosa, que la unión hace la fuerza. Entonces, adelante: empiecen o sigan, con el entusiasmo que les caracteriza y con la determinación que no les falta. Yo, todos nosotros, estamos con ustedes… hasta alcanzar la victoria final, cuando Dios quiera. Pero ¿quién cosechará, si no hay quien siembra? Ésta es la tarea de ustedes, en este momento de la historia que, en el fondo, ya hace vislumbrar que no está lejos el objetivo por el cual viven.» Chiara Lubich